Este espacio hace huelga feminista el 8M2023
Con motivo del 8M: Día Internacional de la Mujer, las mujeres de la OFIC hacemos huelga general de cuidados, consumo, estudiantil y laboral.
El diseño del espacio que habitamos, a través de la arquitectura y el urbanismo, afecta y es afectado a multitud de áreas y esferas de la vida. Desde el equipo completo queremos sumarnos al movimiento compartiendo algunas reflexiones sobre certezas, retos y propuestas que vemos en nuestro día a día a través del trabajo que realizamos.
Hacia la Sostenibilidad de la Vida
La Economía Solidaria viene en los últimos años estableciendo un diálogo y enriqueciéndose de los aportes de la economía feminista con la idea de superar la fragmentación entre producción y reproducción1Economía solidaria y economía feminista: elementos para una agenda. Miriam Nobre. REAS – Red de Economía Alternativa y Solidaria de Euskadi. Enero de 2015. https://reaseuskadi.eus/wp-content/uploads/Papeles-ES04-cas.pdf, hasta el punto de haber revisado y adaptado ciertas claves de su carta de principios.
La Economía Feminista es una corriente de pensamiento económico que pone en crisis las teorías económicas históricas e imperantes en la actualidad que (1) han desvalorizado los aportes de las mujeres economistas a lo largo de la historia, (2) visibiliza las desigualdades que han sufrido y sufren las mujeres y (3) aporta propuestas para la construcción de una economía equitativa y justa para la sociedad y sus ecosistemas.
La Economía Social y Solidaria (ESS) defiende una práctica económica (alternativa al funcionamiento capitalista) centrada en las personas, las comunidades y su entorno socioambiental y, por lo tanto, los procesos que garanticen la sostenibilidad ampliada de la vida2Economía Solidaria y Feminista. Reas Euskadi https://reaseuskadi.eus/hacemos/feminismo/.
Esta nueva corriente de pensamiento tiene su aterrizaje también en la dimensión urbana de los retos ecosociales a los que nos enfrentamos. Un ejemplo claro de ello, es la corriente de pensamiento heterodoxa del Urbanismo Ecofeminista que, —al igual de la Economía Feminista—, pone en crisis idénticas dimenisones aterrizadas a nuestra disciplina: (1) la desvalorización del aporte realizado por las mujeres histórcamente en el diseño, (2) el posicionamiento subalterno y las desigualdades que han sufrido y sufren las mujeres en el espacio diseñado y (3) las propuestas para la construcción de espacios más justos y equitativos para todas.
Para la OFIC, la ESS es actualmente la inspiración y herramienta más interesante desde la que apoyarnos para aterrizar muchas de las soluciones en materia de diseño, arquitectura y urbanismo en nuestros proyectos.
El aterrizaje de la Economía Solidaria en el diseño, la arquitectura y el urbanismo
El espacio que habitamos, como ya sabemos, no es neutro y cataliza todo tipo de desigualdades (tanto a las mujeres como a otro tipo de colectivos vulnerados o en riesgo de serlo). Y para transitar a nuevos contextos de justicia espacial, se pueden llevar a cabo aportes desde el urbanismo hacia la economía (–>) y desde la economía hacia el urbanismo (<–).
A continuación te compartimos algunos de estos aportes.
–> Desde el Urbanismo Ecofeminista hacia la Economía Social
Uno de los campos de trabajo más importantes ahora mismo de la OFIC y de otras muchas entidades a las que admiramos, estudiamos y seguimos o con las que colaboramos, es romper con la dualidad público-privada. Esto es, metafóricamente y para que nos entendamos, romper con la transición del espacio privado (la vivienda) y el espacio público (la calle) materializada en la fachada como unidad mínima de diseño espacial a través del pasillo y la puerta.
Aquí se abren un sinfín de posibilidades que radican en trabajar esta nueva escala comunitaria en el diseño de los espacios, ya que es en ella —en lo común—, donde se posibilitan los cuidados desde la corresponsabilidad y las redes de apoyo mutuo.
Algunas de estas soluciones en la actualidad, son:
1. Dispositivos de activación comunitaria
Artefactos mínimos que buscan propiciar el encuentro en el espacio público y la interacción ciudadana. Estos dispositivos los estamos utilizando actualmente en Mestura La Palma —además de en otros proyectos— para crear de experiencias culturales que faciliten el reencuentro y la puesta en valor de la memoria, el patrimonio y el arraigo de las personas afectadas por el volcán, con el objetivo de acompañarlas y fortalecer sus redes de apoyo mutuas en su proceso vital actual.
2. Espacios Cívicos como puntos de encuentro
Laboratorios ciudadanos, de fabricación digital, de innovación urbana, de prácticas colaborativas, espacios de coworking, centros sociales autogestionados… o tu propia asociación de vecinos del barrio. Lugares comunes de encuentro que rompen con esta dualidad público-privada y que tienen en común priorizar primero a la comunidad y luego la infraestructura. No todos estos lugares funcionan de idéntica forma, pero sí que comparten lógicas similares. Te compartimos estas claves en el informe de Espacios Cívicos que realizamos hace unos años.
3. Vivienda
El espacio privado por excelencia en el diseño y uno de los grandes temas en la actualidad. Un espacio complejo que puede convertirse tanto en el escenario en el que se reproduce la violencia hacia las mujeres, como en la pieza fundamental que les permite emanciparse, empoderarse y salir de ese contexto para ponerse a salvo y recuperar sus vidas.
En ella se puede incidir en la fachada como límite y extender sus dimensiones para generar espacios de cuidado, vigilancia informal y corresponsabilidad, donde afianzar las redes de apoyo y combatir en comunidad los malestares de la vida cotidiana.
4. Urbanismo de lo común y lo próximo
El espacio público cataliza todo tipo de desigualdades y está constantemente en disputa, siendo en muchas ocasiones el campo de batalla de infinidad de luchas ecosociales. En la actualidad existen diferentes iniciativas, proyectos y conversaciones en torno a cambiar la escala del diseño y trabajar desde la vida cotidiana y lo próximo para devolverle la ciudad a las personas. Una de ellas es, quizás, la ciudad de 15 minutos (París) o las Superilles (Barcelona). Estas ideas no son nuevas y son fruto del pensamiento colectivo feminista de grandes diseñadoras, arquitectas y urbanistas silenciadas a lo largo de la historia, como Jane Jacobs (que, paradójicamente, era escritora y periodista 😉). Sus ideas resuenan más que nunca en el plano de nuestras ciudades actuales defendiendo espacios más habitables, seguros y justos para las mujeres.
<– Desde la Economía Social hacia el Urbanismo Ecofeminista
En el imaginario de nuestra profesión, pareciera que todas las propuestas y soluciones debieran tener un aterrizaje físico en el espacio y la verdad es que en muchas ocasiones, las mejores aportaciones en materia de diseño, arquitectura y urbanismo, vienen de la mano de propuestas e intervenciones en los modelos de gestión.
1. Emprendimiento sostenible
Los estereotipos de género se siguen manteniendo: las mujeres seguimos realizando en gran mayoría todas las profesiones que tienen que ver con cuidados y realizamos al menos 2,5 veces más trabajo doméstico y de cuidado no remunerado que los hombres.
Frente al sistema económico hegemónico del capitalismo, las cooperativas de trabajo asociado se presentan como una alternativa sostenible para la vida de sus personas trabajadoras debido a su funcionamiento cooperativo basado en la participación democrática y en la gestión colectiva, favoreciendo que la brecha de género sea menor que en empresas mercantiles. En España el 58% de las cooperativas de trabajo constituidas en 2022 las impulsaron mujeres (datos de Coceta: Confederación Española de Cooperativas de Trabajo Asociado).
2. Servicios y productos de gestión urbana
La digitalización del trabajo provoca cambios en la estructura laboral y borra la separación entre el trabajo y la vida privada. España ha llevado a cabo un gran paquete de reformas para controlar y gestionar esta problemática a través de leyes como la Ley Rider, pero existen alternativas económicas que nos permiten avanzar en la autogestión colectiva hacia un consumo más soberano y responsable. Frente al capitalismo de plataforma, podemos apostar por el cooperativismo de plataforma en soluciones de consumo y movilidad claves para diseñar mejores ciudades: más justas y sostenibles. Algunos ejemplos son:
- Movilidad sostenible en la ciudad: Som Mobilitat
- Telefonía consciente: Som Connexió
- Energía en la ciudad: Som Energia
- Finanzas éticas: Fiare Banca Ética
- Periodismo ético: El Salto Diario
- Alimentación sostenible: Grupos de consumo locales
3. Acceso a una vivienda digna
Más allá del propio diseño, en las cooperativas de vivienda en cesión de uso primero se construye la comunidad y luego la infraestructura. Pero no sólo esto, destacamos de esta alternativa de acceso a la vivienda que. además de cumplir un fin social para con su comunidad directa, presta un servicio en favor del bien común de la sociedad al liberar el suelo y protegerlo de la especulación, ya que la propiedad es colectiva (no hay división horizontal).
4. Gestión y ordenación del suelo
¿Quién posee la tierra? ¿Quién la cuida?
La agricultura sigue siendo el sector de mayor empleo para las mujeres en los países en desarrollo y las zonas rurales, un sector que en gran medida cae dentro de la economía informal con poca o ninguna protección social y derechos laborales. Esta brecha de género se acentúa en los territorios rurales donde, además, menos del 15% de la tierra cultivable a nivel mundial es de mujeres.
El Community Land Trust (CLT) o Fideicomiso de Tierras Comunitarias está compuesto por entidades sin ánimo de lucro que recuperan y poseen tierras en nombre de una comunidad basada en un lugar. Pueden actuar en viviendas, espacios cívicos, espacios naturales, activos comunitarios… en nombre de la comunidad próxima con la idea de sacar el suelo de la especulación y garantizar un uso y gestión digno justo para la ciudadanía.
Esta figura jurídica es una alternativa de tenencia y gestión del suelo frente a la propiedad privada y su ordenación pública (planes de ordenación) que integra a las comunidades en su gestión y posesión y fortalece el arraigo y cuidado al territorio.
¡Únete a la Economía Solidaria!
Te animamos a que te sumes al movimiento de la Economía Social y Solidaria participando de tu red más cercana o consumiendo a través del Mercado Social.
- Mercado Social de REAS
- REAS en los territorios de la OFIC
Nosotras seguiremos aportando nuestro granito de arena en la lucha feminista desde la cultura comunitaria, el diseño, la arquitectura y el urbanismo.
Les deseamos a todas un 8M reivindicativo.
¡VIVA LA LUCHA DE LAS MUJERES!
💚💜🌈
Alicia Morales, Laura Ramiro y María Tomé.
